Ozzy Osbourne ha negado a Daily Mail que su recaída en las drogas de 2012 se debiera al cáncer que le fue diagnosticado al guitarrista de BLACK SABBATH Tony Iommi.
"La única razón fue que yo soy un alcohólico, te encuentras un día soleado y no ves nada que se interponga entre tú y tu cerveza. Después entras en el espiral y estás tirado en el suelo deseando no tener que ver otro amanecer. Si tomas cocaína puedes estar bebiendo siempre, la cocaína y el alcohol son el beicon con huevos de los adictos; la combinación perfecta. No puedes parar. Un día me mire al espejo y me dije ‘nunca más’, y ahora lo intento cada día.
En aquellos momentos no pensaba en nada, sobre todo porque estaba fuera de mí. Durante el rodaje del programa para MTV bebía continuamente. Yo estaba en mi mundo de locura y Sharon tenía que hacer de madre y soportar todo eso.
Una vez mi hijo Jack me preguntó qué porque lo hacía si no tenía que trabajar, si no tenía preocupaciones y cuando nunca había necesitado nada. Luego me dijo: ‘intenta ser un padre.
Sharon me dice que soy un idiota y me grita cuando estoy bebiendo, pero eso no me para. A pesar de todo ella me apoya, sabe que es una enfermedad y que es parte de mí, así que tiene claro que solo yo puedo hacerlo. Y lo hago porque no quiero perder lo que tengo con Sharon y nuestros hijos. El único que puede curar una adicción es el propio adicto."
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